Templos y áreas escénicas en Mongolia Interior, Fujian y Liaoning se vieron obligados a ocultar las estatuas budistas que se hallaban situadas al aire libre en medio de la campaña nacional del PCCh tendiente a erradicarlas.
por Gu Qi
La magnífica estatua del Buda Shakyamuni se encuentra situada en la cima de la montaña de Lianhua, frente al Río Amarillo, en el pintoresco centro turístico de Lianhua emplazado en Baotou, una ciudad de Mongolia Interior. Los residentes de una aldea cercana afirman que la estatua fue tallada a partir de más de 20 000 toneladas de granito.
Pero el Shakyamuni de 40 metros de altura no pudo librarse de la campaña del Partido Comunista Chino (PCCh) tendiente a erradicar todas las grandes estatuas religiosas situadas al aire libre que se está extendiendo por todo el país: las autoridades locales ordenaron ocultarla en una montaña artificial especialmente construida para tal fin. El proyecto comenzó en julio de 2019 y aún sigue en curso.
«El Buda ahora meditará en la montaña y reaparecerá cuando Xi Jinping ceda el cargo», bromeó sarcásticamente un aldeano.
Una fuente le dijo a Bitter Winter que el pintoresco centro turístico de Lianhua fue construido en los terrenos de un antiguo templo con inversiones privadas atraídas por el Gobierno del poblado de Shaerqin para desarrollar el turismo en la zona. Luego de que se exigiera el cubrimiento de la estatua, todos los proyectos en curso en el complejo fueron suspendidos.
Según la fuente, a principios del año pasado, antes de que comenzara el trabajo de ocultamiento de la estatua del Shakyamuni, el Gobierno contrató trabajadores para destruir las estatuas budistas existentes en el templo emplazado en la montaña.
A fin de evitar fugas de información, las autoridades locales gastaron cuantiosos recursos para bloquear las carreteras que conducían a la montaña con alambre de púas e instalar cámaras de vigilancia. Se envió personal a la zona para patrullar la montaña y evitar que los turistas y los creyentes subieran a la cima.
«El PCCh prohíbe que las personas adoren a Buda y quiere que veneren a Mao Zedong porque les preocupa que las creencias religiosas se apoderen de las mentes y los corazones de las personas», comentó la fuente.
La icónica estatua del Buda Amitābha, de 27 metros de altura, situada en las afueras del Templo de Puzhao emplazado en Longhai, una ciudad a nivel de condado de la ciudad de Zhangzhou, en la provincia suroriental de Fujian, fue construida en el año 2006 a un costo de más de 1 millón de yuanes (alrededor de 140 000 dólares).
Según un budista local, el templo, popular entre los creyentes chinos y extranjeros, había incorporado estilos que representan diferentes tradiciones de la arquitectura budista de otros países, tales como Malasia y Tailandia. En el año 2010, el Gobierno local le otorgó el título de «Uno de los templos clave de Zhangzhou para el intercambio con Taiwán».
En noviembre de 2019, el Departamento de Trabajo del Frente Unido (UFWD, por sus siglas en inglés) de la ciudad y la Agencia de Asuntos Religiosos exigieron que el templo cubriera la estatua de Amitābha. Los budistas locales temen que el ícono oculto no pase las inspecciones gubernamentales y se ordene su desmantelamiento.
Una estatua de cobre rojo del “Bodhisattva de la tienda de la tierra”, donada por un budista al Templo de Anfu de la ciudad de Zhangzhou en agosto de 2019 padeció el mismo destino. Con menos de 10 metros de altura, la construcción del ícono costó más de 2 millones de yuanes (alrededor de 280 000 dólares). Dos meses después, la Agencia de Asuntos Religiosos local le ordenó al templo cubrir la estatua con láminas de hierro. Sobre la cubierta se adjuntó una consigna que dice: “No olvides tu intención inicial. Ama a tu país, ama a tu religión».
En el mes de octubre, una estatua de Kwan Yin situada en un templo emplazado en la isla de Geli de la ciudad de Zhuanghe, en la provincia nororiental de Liaoning, fue cubierta con consignas en las que se pedía proteger los recursos naturales. La puerta del templo fue cubierta con tablones negros.