Las autoridades chinas están confiscando los pasaportes de ciudadanos, asegurándose de que solo las personas «políticamente limpias» y patriotas puedan salir del país.
Yang Xiangwen
Las autoridades chinas están expandiendo su control a largo plazo sobre los viajes privados de ciudadanos que salen del país. El año pasado, no solo se aplicaron dichas restricciones a funcionarios de bajo nivel y a empleados de empresas estatales, sino también a maestros y a trabajadores de la salud. Para evitar que las personas viajen al extranjero, todos deben entregar sus pasaportes.
Confiscación de pasaportes como misión política
Un empleado de una empresa estatal emplazada en la provincia china central de Hubei le dijo a Bitter Winter que, a fines de noviembre de 2018, aproximadamente 20 empleados de su unidad fueron penalizados por no entregar sus pasaportes antes de una fecha límite establecida. Las sanciones incluían advertencias del Partido Comunista, degradaciones, multas de 500 a 5000 yuanes (aproximadamente de 75 a 750 dólares) y otras similares. El liderazgo del departamento disciplinario convocó a algunos de sus colegas para amonestarlos, notificándoles que este paso en falso «quedaría asentado en su historial».
“Estas severas sanciones se deben a que el Departamento de Organización del Comité del Partido a nivel provincial y el Departamento de Seguridad Pública de la provincia han emitido la Notificación sobre tareas especiales continuas tendientes a gestionar el manejo y la posesión ilegal de documentación para salir del país con fines privados. El documento exige la implementación de sanciones más estrictas para los miembros del Partido y el personal directivo de nivel medio involucrados en cuestiones relacionadas con la documentación necesaria para viajar al extranjero», afirmó el empleado. El mismo no entregó su pasaporte en el momento en que se le ordenó hacerlo debido a su atareada agenda de trabajo, por lo que recibió una dura advertencia y se le informó que debería gestionar la entrega de su pasaporte como una tarea política.
En octubre de 2018, un hospital emplazado en la Región Autónoma Hui de Ningxia situada en el centro-norte de China, recibió una notificación en la que se exigía que todo el personal entregara sus pasaportes. Como muchos empleados del hospital se negaron a hacerlo, la policía rápidamente obtuvo información sobre cuándo y dónde se habían emitido sus pasaportes y los confiscó, asegurándose de no pasar a nadie por alto.
Un empleado del hospital sumamente traumatizado afirmó: «Ni siquiera puedes negarte, porque si lo haces, te encontrarán y te llevarán a la Agencia de Seguridad Pública. Mis colegas y yo estábamos tan asustados que entregamos nuestros pasaportes de inmediato».
El patriotismo es el requisito previo más importante para poder viajar al extranjero
El 18 de marzo de este año, la administración de una escuela primaria emplazada en la ciudad de Liaoyang, en la provincia china nororiental de Liaoning, exigió que todos los maestros entregaran sus pasaportes. Algunos maestros trataron de oponerse a tal orden, pero el director de la escuela les dijo que las únicas personas que podían salir del país eran aquellas que tuvieran familiares en el extranjero celebrando eventos tales como bodas y funerales. «¡Ni siquiera piensen en viajar al extranjero, ya que su solicitud no será aprobada!», afirmó el director, agregando que aquellos que no hubieran solicitado un pasaporte ya no tendrían ninguna oportunidad de obtener uno.
Según un maestro procedente de Ningxia, el Partido Comunista Chino (PCCh) había recolectado pasaportes de ciudadanos en el pasado, pero dicha política nunca antes había sido implementada de manera tan estricta. No obstante, las circunstancias han cambiado significativamente en los últimos dos años y las unidades de trabajo han iniciado una implementación más estricta del requisito, presionando a los empleados, incluso al personal retirado, para que entreguen sus pasaportes.
«Esta vez, cuando solicité viajar al extranjero para visitar a mi hija, solo para obtener mi pasaporte, tuve que someterme a investigaciones en tres niveles diferentes», afirmó el maestro. «Las autoridades de la escuela me dijeron que la política actual del Gobierno es que, en principio, ningún miembro del personal puede salir del país, excepto para asistir a la graduación de sus hijos o a ceremonias de boda en el extranjero».
El maestro se quejó afirmando: «No nos han brindado ningún tipo de explicación, incluso para una política tan importante como la de incautación de pasaportes. La administración se está volviendo cada vez más estricta y, luego de ser entregado, un pasaporte se convierte en un ‘lujo’ que solo podrás anhelar, pero no poseer».
Y las restricciones relacionadas con los viajes continúan expandiéndose, afectando a personas de todos los niveles sociales. Los Reglamentos sobre la investigación política de miembros del cuerpo docente de la Universidad Médica de Fujian que salen del país en servicio exigen que los miembros del personal que soliciten viajar deberán ser investigados y deberán ser «políticamente confiables, poseer un historial [político] limpio, amar fervientemente a la patria socialista, ser de ideología progresista, poseer integridad moral, y acatar la ley y las normas disciplinarias. Se deberá hacer hincapié en la investigación de la información personal básica de los solicitantes, del estado de sus familiares, etc.”.
Un individuo que había solicitado viajar al extranjero reveló que no solo fue sometido a una investigación rigurosa, sino que antes de salir del país también tuvo que firmar una declaración prometiendo que no participaría en ninguna organización en el extranjero, que no expresaría ningún tipo de opinión desfavorable para el Estado y que no divulgaría secretos de Estado.