Incluso los lugares religiosos administrados por el Gobierno son severamente perseguidos, el objetivo final del PCCh es debilitar el cristianismo hasta erradicarlo.
por Wang Yichi
La provincia china central de Henán, hogar de una gran cantidad de cristianos, es uno de los principales objetivos de las persecuciones religiosas del Partido Comunista Chino (PCCh). Solo en agosto de 2018, en Xinmi, una ciudad a nivel de condado administrada por Zhengzhou, la capital de Henán, se clausuraron 56 sedes pertenecientes a la Iglesia de las Tres Autonomías administrada por el Gobierno. En el año 2019, el Gobierno demolió por la fuerza algunos de los lugares que habían sido anteriormente clausurados o los reconvirtió para darles otro uso. Las congregaciones a menudo son presionadas para que «donen» sus iglesias al Gobierno.
La mayoría de los lugares de reunión clausurados en Xinmi habían sido construidos con fondos recaudados por los creyentes, el costo de cada uno oscilaba entre 200 000 yuanes (aproximadamente 28 000 dólares) y 3 millones de yuanes (aproximadamente 426 000 dólares). El monto gastado para construir 37 de los 56 lugares clausurados totalizaba 13 millones de yuanes (alrededor de 1,84 millones de dólares).
Según un creyente local, los 56 lugares de culto clausurados se habían expandido entre los años 2015 y 2017, durante la época en la cual el Gobierno provincial promoviera la política de colocar las sedes de reunión cristianas privadas bajo la administración del Movimiento Patriótico de las Tres Autonomías. Xinmi fue elegida como ciudad de prueba para poner en marcha dicha estrategia.
Antes de que la política fuera promulgada, los lugares no cumplían con los requisitos imprescindibles para el registro legal. Pero tan pronto como quedaron supeditados a la dirección de la organización estatal, la Agencia de Asuntos Religiosos los aprobó y emitió todos los certificados necesarios. Desde entonces, cada lugar fue administrado de manera directa por iglesias de las Tres Autonomías emplazadas en la zona a la que habían sido asignados. Al igual que sucede con otras organizaciones religiosas estatales en China, los lugares tuvieron que presentar listas de miembros para la congregación, conservar un libro de registro de actividades, y su personal, tamaño y la frecuencia de sus reuniones fueron sometidos a un estricto control.
Desde la entrada en vigor de los nuevos Reglamentos sobre Asuntos Religiosos en febrero del 2018, incluso los lugares religiosos que ya eran controlados por el PCCh están siendo atacados debido a que el régimen cree que su existencia amenaza su dominio. Los cristianos creen que el Gobierno está intentando clausurar todos los lugares religiosos, independientemente de quién los administre, con el objetivo de debilitar el cristianismo y erradicarlo de manera gradual.
En el año 2015, los dos Consejos Cristianos Chinos de Xinmi gastaron dos millones de yuanes (alrededor de 280 000 dólares), donados por creyentes locales, para comprar las instalaciones de la Iglesia de Zhoulou. Se gastó otro millón de yuanes (alrededor de 140 000 dólares) para comprar decoraciones y equipar la iglesia, ascendiendo a un total de tres millones de yuanes (alrededor de 420 000 dólares). Pero recientemente, las autoridades locales le vendieron por la fuerza la iglesia al comité del pueblo a un precio sumamente bajo.
Los lugares de reunión emplazados en las aldeas de Mazhai y Shipokou, administradas por Xinmi, fueron construidos a un costo de 400 000 yuanes (aproximadamente 56 000 dólares) y 240 000 yuanes (aproximadamente 34 000 dólares), respectivamente. Ambos lugares de reunión se vieron obligados a firmar acuerdos de donación en los cuales les transferían sus derechos al Gobierno, quien actualmente utiliza las instalaciones para llevar a cabo actividades relacionadas con el PCCh.
La Iglesia de Caomiao emplazada en Xinmi fue construida con donaciones realizadas por los creyentes; 200 000 yuanes (aproximadamente 28 000 dólares) en total. El 25 de agosto de 2018, la iglesia fue clausurada por la fuerza y convertida en un club cultural. Algunas otras iglesias en Xinmi se alquilan a empresas y se utilizan como almacén.
Los lugares de reunión protestantes emplazados en Nanyang, una ciudad a nivel de prefectura de Henán, también han sido sometidos a severas represiones. En los condados de Xichuan y Tanghe, administrados por Nanyang, hasta la fecha, se han clausurado 95 lugares de reunión, mientras que en la ciudad a nivel de condado de Dengzhou, 141.
Un funcionario del Gobierno del condado de Xichuan les dijo a los creyentes locales que el Estado está llevando a cabo, a lo largo de toda China, implacables represiones contra las personas de fe, ya que «los mismos superan en número a los miembros del Partido Comunista Chino».