El pueblo cham de Sanya forma parte de una minoría musulmana que posee una rica historia y una identidad sinigual. Actualmente, el PCCh ha decidido erradicarlos.
por Ling Tian
Recientemente, Bitter Winter recibió un documento titulado «Plan de trabajo para el fortalecimiento de la gobernanza integral de la comunidad Huixin y de la comunidad Huihui (Utsul)«, emitido en el año 2019 por la Oficina del Comité del Partido del distrito de Tianya y la Oficina del Gobierno del distrito de Tianya de la ciudad de Sanya, en la provincia sureña de Hainan.
Un grupo étnico especial
La aldea de Huixin y la aldea de Huihui se encuentran dentro de la jurisdicción del poblado de Fenghuang administrado por la ciudad de Sanya, donde residen aproximadamente 10 000 miembros de una minoría conocida como el pueblo hui de Sanya, uno de los pocos grupos étnicos no reconocidos en China. De hecho, el Partido Comunista Chino (PCCh) los clasifica erróneamente como pertenecientes al pueblo hui, mientras que el nombre correcto debería ser chams de Sanya, un grupo étnico que se formó dos siglos antes que el pueblo hui de China continental.
Los chams de Sanya constituyen el único grupo musulmán de la isla de Hainan con una rica cultura islámica, pero el Gobierno está poniendo en marcha una campaña tendiente a erradicar los remanentes de su sinigual historia.
El documento estipula los seis aspectos de la represión integral, entre los que se incluye la rectificación de la disciplina, de la comunidad, de los símbolos y letreros, de las escuelas y hospitales, una auditoría financiera obligatoria, y la demolición y reubicación de los edificios ilegales.
Bajo el título «rectificación de la disciplina», el documento estipula que la población tiene prohibido usar túnica o velo en los lugares de trabajo, así como también publicar fotos con personas usando túnica o velo en los mismos. Exige averiguar qué miembros del PCCh son religiosamente activos, enviar miembros del Partido para que se unan a los comités de gestión de las mezquitas, y asignar personal para que se hagan cargo del trabajo del frente unido en la comunidad Huixin y en la comunidad Huihui.
En lo que respecta a la «rectificación de símbolos y letreros», el texto estipula que se deberán investigar todas las viviendas, restaurantes y hoteles, se deberán eliminar las escrituras en árabe, los patrones de oración a La Meca, las consignas religiosas y los letreros que contengan la palabra «halal», y se deberán prohibir los libros, imágenes, patrones y símbolos que se sospeche que promuevan lo que el PCCh denomina «saudización», «arabización» o «generalización de lo halal».
Bajo el título «demolición y reubicación de los edificios ilegales», el documento estipula que los edificios de estilo saudí y árabe deberán ser prohibidos. En lo que respecta a la «rectificación de las auditorías financieras», exige efectuar una investigación pormenorizada de los fondos recaudados por cada mezquita local.
«Plan de trabajo para el fortalecimiento de la gobernanza integral de la comunidad Huixin y de la comunidad Huihui (Utsul)» (imagen tomada de Weibo).
El profesor asociado Zhang Liang, del Centro de estudios de minorías étnicas de la frontera suroccidental china de la Universidad de Yunnan, publicó un documento de investigación. Según este documento, los chams de Sanya conforman un grupo que se adhiere estrechamente a sus enseñanzas islámicas tradicionales. Mantienen seriamente su estilo de vida halal en sus aldeas. A pesar de que la carne de res y de cordero es más cara en sus aldeas, no comprarán esta comida en otros lugares (donde no hay garantía de que sea realmente halal) por el simple hecho de ahorrar dinero. Si trabajan en lugares que no poseen cocinas halal, los chams se apresurarán para poder ir a comer a sus hogares sin importar cuán ocupados estén en el trabajo. Cuando tengan que comprar alimentos cocinados, verificarán si los mismos cuentan con un logotipo de halal.
En lo que respecta a la vestimenta, las niñas chams siempre usarán un velo, prendas de vestir largas y pantalones después de cumplir los 9 años. Existen algunos estudios fotográficos especializados en lo halal para que los recién casados puedan tomar fotos de sus bodas.
Monitoreo intensificado: ¿una réplica de Sinkiang?
La sinigual cultura étnica y religiosa cham de Sanya ha motivado el interés investigativo de numerosos académicos. La población local es simple y honesta, se ayudan entre sí y el desarrollo económico de la localidad se encuentra entre los mejores de la provincia de Hainan. Muchos académicos creen que esto se debe, en gran medida, a su adhesión a la creencia tradicional islámica y a su ética laboral.
Un investigador mencionó en su artículo, «las aldeas de Huixin y de Huihui poseen un buen ambiente de seguridad pública y en las mismas nunca han ocurrido incidentes violentos». La investigación afirma que los residentes locales «no se apropian de ningún artículo abandonado y que no tienen que cerrar las puertas con llave por la noche». «Este buen ambiente es el resultado de su devota creencia religiosa en el islam».
Aun así, el documento exige, con la excusa de «mantener el orden social», intensificar el control sobre los residentes locales y actualizar los dispositivos de vigilancia para que durante el monitoreo no se pase nada por alto. También exige fortalecer el sistema de la red y la gestión de las propiedades de alquiler. Estas medidas forman parte de la «rectificación de la comunidad».
Lo que les está sucediendo a los chams de Sanya es otra evidencia más de que, en la China de Xi Jinping, las culturas e identidades tradicionales arraigadas en la religión están siendo sistemáticamente erradicadas.