Las autoridades en Jiangxi recientemente clausuraron una iglesia taiwanesa y deportaron a sus líderes.
Bitter Winter informó anteriormente sobre cómo las autoridades en China están exigiendo una vigilancia más estricta de los grupos religiosos extranjeros y nacionales. Esta política ya ha afectado a numerosas iglesias surcoreanas y está ganando terreno con respecto a otras instituciones religiosas extranjeras en el país.
Una iglesia taiwanesa emplazada en Jiangxi, la cual estaba situada en una unidad de departamentos alquilados en la comunidad de Jinjiayuan, fue clausurada recientemente. El 26 de agosto, la policía le tendió una emboscada a la iglesia durante una congregación y arrestó a aproximadamente 30 cristianos y a dos líderes de dicha iglesia taiwanesa.
Cuando los vecinos intentaron grabar el incidente con sus teléfonos móviles, la policía les prohibió hacerlo. Los líderes de la iglesia fueron pronto deportados a Taiwán.
Las autoridades habían estado explorando el área durante tres semanas antes de la clausura. Policías vestidos de civil habían sido enviados para que permanecieran cerca de la iglesia. Los mismos vigilaron a varios creyentes y cada uno de sus movimientos. El propietario del apartamento también fue presionado para cancelar el contrato de alquiler
Informado por Lin Yijiang