Ocho miembros de una familia cristiana han sido vigilados, detenidos y condenados a prisión en múltiples ocasiones.
La familia de Fang Jun, así como las familias de sus tres hermanos, pertenecen a una Iglesia doméstica cristiana en la ciudad de Benxi, provincia de Liaoning. Durante diez años, han sido perseguidos constantemente por el Partido Comunista Chino y obligados a esconderse cada vez que uno era detenido. En la actualidad, la hija y el yerno de Fang Jun aún cumplen condenas de prisión.
En agosto de 2006, Fang Jun, su esposa, sus tres hijas y uno de sus yernos fueron detenidos por la policía a causa de su fe. Más de 20 miembros de su congregación también fueron detenidos. Fang Jun fue liberado al día siguiente, pero su esposa permaneció detenida durante 15 días. Sus hijas, su yerno, y una de las dos hermanas, en cambio, fueron acusados de “alterar el orden público” y condenados a dos años de reeducación a través del trabajo.
Poco después, la policía comenzó a vigilar los pasos de Fang Jun y su esposa, Liu Hui. Incluso se instaló una mesa para jugar mahjong fuera de su casa para que los informantes de la comunidad observasen sus movimientos y reportasen al respecto mientras fingían jugar.
Dos semanas después, la policía detuvo nuevamente a Liu Hui durante 15 días. Fue detenida cinco veces en los años siguientes.
La madrugada del 28 de octubre de 2015, la hija y el yerno de Fang Jun, así como su hermano y su cuñada, fueron detenidos de nuevo. En mayo de 2017, la hija y su esposo fueron condenados a tres y tres años y medio de prisión, respectivamente, tras haber permanecido detenidos ilegalmente durante año y medio. Aún están cumpliendo sus condenas en la ciudad de Shenyang, provincia de Liaoning.
Informado por Piao Junying