El Partido Comunista Chino intensifica las medidas represivas contra las estatuas budistas y taoístas situadas al aire libre, eliminándolas o modificándolas. Incluso los símbolos religiosos más pequeños deben desaparecer.
por Wang Anyang
Liaoning: no más virtud y misericordia
El Área Escénica del Monte Jiuhua, situada en la ciudad de Linghai, en la provincia nororiental de Liaoning, es un área escénica nacional de nivel 4A, donde dos deidades budistas experimentaron una drástica transformación durante la primera mitad del año.
La estatua del Bodhisattva Samantabhadra o Virtud Universal fue modificada, quedando irreconocible: el cuerpo de la deidad fue removido y reemplazado por una composición que simboliza la cosecha de cultivos.
La estatua de Kwan Yin –la diosa budista de la misericordia– fue modificada para que se asemejara a Chang’e –la diosa de la luna en la mitología china– cambiando su peinado, agregándole un moño y trenzas. La inscripción budista original que se hallaba situada en la base de la estatua ha sido reemplazada por «Chang’e vuela a la luna».
Según se informa, la estatua ha sido modificada para evitar su demolición. Se construyó un pabellón para albergar a la estatua y ahora la gente asiste al lugar para adorar a la diosa mitológica china en un pabellón budista.
Shaanxi: Incluso las estatuas más pequeñas tienen que desaparecer
La altura de las estatuas religiosas es a menudo la razón dada por el Gobierno para derribarlas. En el caso del Templo de Chanlong, emplazado en la ciudad de Baoji de la provincia noroccidental de Shaanxi, este razonamiento no se aplica. La estatua del «Buda de tres rostros» situada en la cima de la Pagoda de Haihui dentro del templo es apenas perceptible desde la distancia. Aun así, en el mes de junio, las autoridades decidieron desmantelar sus estatuas, dejando solo el pararrayos situado en el techo.
Del mismo modo, a fines de junio, varias pequeñas estatuas recubiertas en oro que se hallaban situadas en una pagoda budista de siete pisos dentro del Templo de Lingying, emplazado en el poblado de Zhaocun bajo la jurisdicción de la ciudad de Xingping, fueron removidas. Veinticuatro deidades recubiertas en oro –cuatro en cada piso, desde el primero hasta el séptimo– fueron removidas por trabajadores contratados por el Gobierno. Tres pequeñas estatuas situadas sobre la entrada del templo fueron cubiertas con un paño.
Un residente de la zona reveló que las autoridades provinciales emitieron notificaciones a todos los niveles subordinados del Gobierno, exigiendo el desmantelamiento de todas las estatuas budistas situadas al aire libre, amenazando con despedir al funcionario que no acatase la orden. La advertencia obligó a los burócratas locales a ser más meticulosos al eliminar las estatuas de deidades budistas.
Jilin: una deidad taoísta fue considerada demasiado alta
En un templo taoísta emplazado en la ciudad de Changchun, en la provincia nororiental de Jilin, una estatua de 14 metros de altura del Señor Supremo (太上老君, Taishang Laojun, también conocido como el Gran Señor Supremo Mayor) fue desmantelada el año pasado porque las autoridades consideraron que era demasiado alta.
“Antes de que la estatua del Señor Supremo fuera demolida, le habían cortado la cabeza y los brazos. Es como si hubiera regresado la Revolución Cultural», afirmó un taoísta local. «Xi Jinping, al igual que Mao Zedong, no permite que el pueblo tenga fe y los obliga a creer solo en él. Es ateo y, en mi opinión, cuanto más fuerte es el ateísmo de una persona, más malvada se vuelve la misma».
En junio de este año, en el condado de Yongji de la ciudad de Jilin, se eliminaron las estatuas de Kwan Yin del Templo de Kwan Yin y del Templo de Beihua.