La policía local detuvo de manera ilegal a una mujer miembro de una iglesia doméstica de Tuquan debido a sus creencias. Incluso después de haber sido puesta en libertad, está sujeta a monitoreo.
El 11 de noviembre de 2016, aproximadamente a las seis de la mañana, cinco oficiales de la brigada de policía criminal del Departamento de Seguridad Pública del condado escalaron una pared para entrar a la casa de Sui Fengzhi (seudónimo). La esposaron, registraron su casa y posteriormente la llevaron al Centro de Detención del condado de Hinggan Tuquan.
Siete días más tarde, Sui Fengzhi fue llevada a una estación de policía en la ciudad de Ulanhot en Hinggan, donde la policía siguió interrogándola sobre las finanzas de su iglesia y sobre a qué lugares fue para compartir el evangelio. Forzándola a revelar la ubicación de los fondos de la iglesia, la mantuvieron despierta durante tres días y noches seguidos. “La hemos estado siguiendo durante tres meses. Sabemos cuáles son todos los lugares a los que ha ido”, amenazaron los oficiales. Después de que los múltiples interrogatorios no arrojaron resultados, Sui Fengzhi fue enviada al Centro de Detención de Tuquan por el crimen de “hacer proselitismo ilegal y por perturbación del orden social”.
Para sacarla de prisión, la familia de Sui Fengzhi ha pagado sobornos al director del Departamento de Seguridad Pública local y al capitán de la brigada de policía criminal un total de 26 000 yuanes. No obstante, Sui Fengzhi siguió tras las rejas durante un año y fue multada con 15 000 yuanes. Fue liberada el 11 de noviembre de 2017 y la policía le advirtió que abandonara su fe.
Sui Fengzhi sigue estando bajo vigilancia estricta: no se le permite ir a ninguna parte sin informar al comité de la villa, y si pasa más tiempo visitando a sus vecinos, el jefe de la villa la llamará para exhortarla a que regrese a su casa. La policía local también acude intermitentemente a su casa para verificar la condición de su fe y para ver si ha salido a predicar el evangelio.
Existen muchos otros cristianos como Sui Fengzhi que han sido sometidos a vigilancia de largo plazo incluso después de haber sido liberados de prisión, y muchos de ellos fueron forzados a huir de su hogar. El gobierno exige a los comités de los pueblos y villas, a los departamentos de seguridad pública locales, a las estaciones de policía, a las oficinas judiciales y a los capítulos locales del Comité de la Liga de la Juventud y la Federación de Mujeres que monitoreen y envíen informes sobre los creyentes.
Informado por Gu Qi