El PCCh planea celebrar los 70 años de la República Popular China mediante representaciones de canciones patrióticas y danzas en iglesias. Para los creyentes, se trata de una erosión de la fe.
por Wang Yong
En preparación para el 70 aniversario de la República Popular China o Día Nacional, que se celebrará el 1 de octubre, hace aproximadamente dos meses, todas las iglesias estatales emplazadas en la ciudad de Nanchang recibieron una notificación procedente de las autoridades locales, ordenándoles poner en marcha una competencia de canto coral.
«Inicialmente, los creyentes eligieron cantar algunos himnos, pero tras practicarlos por dos o tres días, se vieron obligados a reemplazarlos con canciones patrióticas ya que los funcionarios de la ciudad afirmaron que los himnos eran inaceptables», afirmo con ira un fiel de la iglesia que se vio obligado a participar en la competencia. «En la actualidad, tienen que cantar canciones en alabanza al Partido y no se les permite cantar canciones en alabanza a Dios. Acaso, ¿eso no es persecución?».
El 17 de agosto, la Iglesia de la Gracia emplazada en Nanchang, capital de la provincia suroriental de Jiangxi, estaba abarrotada de gente. Acababa de finalizar una animada competencia de canto y las puntuaciones de los 12 equipos participantes eran exhibidas en una pantalla. El pastor de la misma le entregó personalmente un premio al coro ganador.
Video: Programas patrióticos organizados por una iglesia de las Tres Autonomías para celebrar el Día Nacional:
Canciones, poesía y pinturas para alabar al Partido
Bajo órdenes del Partido Comunista Chino (PCCh), se están llevando a cabo actividades similares en todo el país. Bitter Winter ha obtenido documentos emitidos por las autoridades de Fuzhou y Quanzhou, ambas ciudades a nivel de prefectura en la provincia suroriental de Fujian, en los que se exige que las iglesias realicen una serie de actividades «para alabar al Partido y bendecir a la patria» antes de la celebración del 70 aniversario. Estas actividades incluyen, entre otras, canciones patrióticas, concursos de ensayos y exposiciones de pintura, caligrafía y fotografía.
Algunas iglesias de las Tres Autonomías emplazadas en la ciudad de Baoding, en la provincia norteña de Hebei, se vieron obligadas a ensayar danzas con canciones patrióticas tales como “Mi patria, mi corazón chino” y “Gran China”, recitar poesía y realizar otros espectáculos. Todo el contenido de los programas debía ser revisado y aprobado por la Agencia de Asuntos Religiosos.
«En nuestra recitación de poesía, escribimos ‘El liderazgo del Señor le ha permitido a China llegar a donde está hoy’. Dicho texto fue revisado tres veces por la Agencia de Asuntos Religiosos, pero nunca fue aprobado», afirmó un creyente.
Los cristianos enfrentan dificultades
En el contexto de la persecución religiosa que resulta en la clausura de incluso iglesias de las Tres Autonomías aprobadas por el Estado, desobedecer las órdenes del Gobierno significa poner en peligro la propia iglesia. Debido a ello, los creyentes no tienen otra opción que interpretar canciones y danzas rojas.
«No podemos cantar la canción ‘Sin el Partido Comunista, no habría una Nueva China’, ni podemos cantar canciones que elogien a Mao Zedong porque entran en conflicto con nuestra fe», explicó un fiel de una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la ciudad de Zibo, en la provincia oriental de Shandong. “Muchos creyentes no pueden aceptar esto. Inicialmente teníamos la intención de hacer mímica, pero la Agencia de Asuntos Religiosos se toma muy en serio esta cuestión: nos graban cantando y pasan las grabaciones en la televisión. Las mismas son utilizadas con fines propagandísticos y explotadas con fines políticos».
Un creyente procedente de la ciudad de Sanmenxia, en la provincia central de Henán, que se vio obligado a participar en una competencia de canciones rojas, explicó que la única razón por la cual su congregación acordó hacer esto fue para preservar la oportunidad de continuar celebrando sus reuniones. «Los miembros del personal gubernamental que enviaron para supervisarnos dijeron que, si no actuábamos, significaría que no apoyamos al Partido Comunista y nuestro lugar de reunión podría ser clausurado. Incluso tomaron fotos y videos de nuestras actuaciones”, afirmó el creyente.
El coro de una iglesia emplazada en la ciudad de Nanping de Fujian fue obligado a cantar canciones rojas los domingos. «Ninguno de nosotros está dispuesto a cantar, pero no podemos decirlo directamente. El domingo es para adorar al Señor. Si te atreves a oponerte a cantar, serás tratado como un objetivo clave de control, y tu vida a menudo se volverá difícil”, afirmó con impotencia un creyente que forma parte del coro.
Si cantar o no canciones rojas y cómo cantarlas se ha convertido en una prueba para los creyentes. De hecho, desde la implementación de los nuevos Reglamentos sobre Asuntos Religiosos, cada acto de «sinización», como por ejemplo, desmantelar cruces, izar la bandera china y colocar propaganda en las iglesias, ha estado atormentando a los creyentes.
Video: Una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la provincia de Liaoning celebró una competencia de canciones rojas.
«¡Todas las personas que aman a Dios son patrióticas!»
Algunos clérigos pertenecientes a la Iglesia de las Tres Autonomías formados por el Estado han acogido activamente los ensayos de espectáculos patrióticos y, en general, apoyan las iniciativas gubernamentales tendientes a hacer que las iglesias chinas sean más patrióticas.
Un pastor de la Iglesia de las Tres Autonomías procedente de Dalian, una ciudad portuaria de la provincia nororiental de Liaoning, afirmó durante una reunión de su congregación que “todos los profetas eran patrióticos, amaban a sus compatriotas y al pueblo». Tras citar «evidencia concreta presente en la Biblia», el pastor añadió: «Es evidente que el patriotismo impregna la Biblia. ¡Todas las personas que aman a Dios son patrióticas!”.
Parece que no existe nada que no pueda ser «sinizado» en China. Algunos cristianos se refieren vívidamente a este fenómeno como «hervir una rana en agua tibia» –la gente no está dispuesta a ser consciente de los actos malvados hasta que es demasiado tarde, tal y como una rana es cocinada hasta morir al ser colocada en agua tibia y hervida lentamente. Sienten que con las acciones gubernamentales en su máximo potencial, la fe cristiana se está extinguiendo en China, y no pueden hacer casi nada para evitarlo.